domingo, enero 07, 2007

Labios de Frambuesa


Yo era un joven desmañado que devolvía al mundo miles de sonrisas diferentes. Con una inocencia razonable, podía extraer de un vistazo el áurea de las personas con las que tropezaba. Discerniendo en apenas unos segundos, si el individuo en sí, era de carne y piel, o de acero candente. Solía corretear por la escalera de mi edificio, arriba y abajo. En mi vecindad me conocían como un alocado chaval de buen trasfondo. Un día conocí a la hija de una vecina que era de mi edad. Era una chica de ojos tristes pero con sonrisa de pastel. Empezamos a coincidir en el portal del edificio, aparentemente por casualidad, hasta que la casualidad empezó a ser tan frecuente que supongo que dejó de serlo.

Solía parpadear entrecortadamente cuando escuchaba las brabuconerías que yo le explicaba. Era una solitaria adolescente de 15 años, buscando su lugar, en un mundo de cristales rotos. En su mochila, literatura de autoayuda femenina, sacos para su propia barricada. Solía decirme que éramos sordos, ciegos y mudos. Que el mundo grita a cada segundo, y nos envía arcoiris, auroras boreales y puestas de sol. Decía que sumergidos en nuestro barrio, éramos incapaces de entender aquel código. Cuando me hablaba así, yo solía mirarla estupefacto, sintiéndome mucho más niño que ella. Nos hicimos inseparables, pese a que éramos la noche y el día. Ella, una preciosidad y yo, un desastre de pelo enmarañado. Supongo que encontró en mí, un chiquillo divertido que la trasportaba a mil y una aventuras improvisadas. Un atardecer me besó sin que yo lo esperara. Esa misma tarde me enamore de aquella mujercita, de sus ojos, de su piel y de sus labios de frambuesa. Veinte años después aun la llevo en mi recuerdo.


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4 Comments:

Blogger SUAVE CARICIA said...

En la vida, hay amores, que nunca pueden olvidarse, te sucede a ti a mi, a todo el mundo, quedan como congelados en el tiempo, cuando se vuelven a encontrar es como que el mundo no giro y vuelves a tener la edad en que viviste ese amor, a veces ni el rose de un simple beso, te despierta y te dice que los años pasaron y que ya tu vida tomo otro rumbo, te niegas a comprender eso, y sabes que haces?...disfrutas de ese amor de nuevo.

dejo suaves caricias

domingo, 7 de enero de 2007, 14:01:00 GMT-8  
Blogger Verena Sánchez Doering said...

hay amore que quedan tatuados en el corazon y nunca se olvidan
cuando se recuerdan evocan mil sentimientos
sabiendo que se extrañan esos aos años que estuvo a tu lado
tomalo como esos instantes que vuelas en magia
besitos y gracias por tus saludos en Sucesos
te dejo un abrazo y una linda semana


besos y sueños

domingo, 7 de enero de 2007, 17:00:00 GMT-8  
Blogger Clarice Baricco said...

Hermoso recuerdo...dejas para más.

Saludos agradecidos.

domingo, 7 de enero de 2007, 20:57:00 GMT-8  
Blogger @Intimä said...

Como la canción de Penelope
sentados en el anden de la vida nuestro amor sigue sin coger el tren del olvido de ese primer amor.
Pero es hermoso mantener en ambar ese recuerdo, sus besos nacarados por la dulzura de ellos y el sabor de la inocencia.
Muy bonito lo que has escrito.
Pd: Quiero agradecerte lo que dejaste en el comentario de mi blog, fue una verdadera delicia leerlo. Espero que nos volvamos a visitar.
Un cálido beso.

lunes, 8 de enero de 2007, 9:20:00 GMT-8  

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